La pasta con salsa de anchoas es un primer plato rápido y sencillo. De bonito color ámbar y sabor salino y ligeramente ahumado, la salsa de anchoas es un ingrediente muy valioso y por ello conviene potenciarlo combinándolo con sabores que no resulten excesivamente abrumadores: una simple pasta de ajo, aceite y guindilla es una de las opciones más adecuadas.
Los secretos para una excelente pasta con salsa de anchoas son pocos: un buen sofrito de ajo y guindilla (fresca, evidentemente, que queda más fragante), pasta escurrida muy al dente, para que se termine de cocinar en la sartén, y un poco de su agua de cocción para batirlo, lo que favorecerá la formación de una salsa casi cremosa. La salsa de anchoas no tiene que cocerse, así que lo mejor es añadirla después de servir la pasta. Otra precaución muy importante a la hora de preparar pasta con salsa de anchoas es no salar la pasta en el agua hirviendo, o salarla muy poco, ya que la salsa de anchoas ya está suficientemente salada. Un buen puñado de perejil fresco picado y la pasta con salsa de anchoas está lista
INGREDIENTES :
360 g de espaguetis
6 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
1 diente de ajo
1 guindilla (picante)
4 cucharadas de Colatura de Anchoa
probar Perejil
MÉTODO
Primero, hierve la pasta en abundante agua sin sal. Después de pelar los ajos y picar la guindilla, sofreírlos durante un minuto aproximadamente en una sartén grande con aceite, inclinándola para que se doren bien.
Escurre la pasta muy al dente, reservando un poco de su agua de cocción, y pásala a la sartén. La pasta debe terminar de cocinarse en la sartén a fuego alto, agregando un poco de agua de cocción para mantenerla húmeda.
Cuando la pasta esté cocida y la salsa se haya mezclado bien con los espaguetis, apaga el fuego y añade el perejil picado.
Vierte todo en un bol y añade una cucharada de salsa de anchoas por persona.
En este punto ya puedes emplatar y servir inmediatamente la pasta con salsa de anchoas.